El cumplimiento fiscal en México exige a los empleadores no solo realizar el pago correspondiente de la Participación de los Trabajadores en las Utilidades (PTU), sino también emitir el Comprobante Fiscal Digital por Internet (CFDI) correspondiente. En este contexto, una de las preguntas más frecuentes entre los responsables de nómina y contabilidad es: ¿cuál es la fecha correcta para expedir el CFDI relacionado con el pago de la PTU?
De acuerdo con la legislación fiscal vigente y los criterios del Servicio de Administración Tributaria (SAT), el CFDI por concepto de PTU debe emitirse en la fecha en que efectivamente se realice el pago al trabajador. Esto implica que no se debe anticipar ni postergar la expedición del comprobante electrónico, ya que la fecha del CFDI debe coincidir con el momento exacto en que el ingreso se pone a disposición del empleado.
Es importante destacar que el pago de la PTU no se considera parte del salario ordinario, sino que constituye un ingreso por remuneración por concepto de participación en las utilidades de la empresa. Por tanto, aunque no forma parte del salario base para efectos de seguridad social, sí debe registrarse en el CFDI bajo el concepto de “otros ingresos” y estar debidamente timbrado.
En cuanto a los plazos, la Ley Federal del Trabajo establece que la PTU debe pagarse a más tardar el 30 de mayo para personas morales y el 29 de junio para personas físicas con actividad empresarial. Por consiguiente, el CFDI deberá emitirse a más tardar en esas fechas, siempre considerando que el momento clave es el de la entrega efectiva del recurso económico al trabajador.
Emitir correctamente este comprobante no solo es una obligación fiscal, sino también un elemento clave para mantener la transparencia y trazabilidad de los ingresos laborales. Además, un error en la emisión, como lo sería una fecha distinta a la del pago real, puede implicar sanciones o complicaciones en caso de auditorías.
En conclusión, las empresas deben asegurarse de emitir el CFDI de PTU el mismo día que se realiza el pago y registrarlo adecuadamente en el sistema de nómina. Este procedimiento asegura el cumplimiento de las obligaciones fiscales y protege tanto a la empresa como al trabajador en términos de documentación y legalidad.
